Imagen Iberdrola |
La afirmación de que en ese uso el verbo en cuestión requiere complemento de régimen generó opiniones opuestas, así que nos encontramos ante uno de esos temas apasionantes que motivan a buscar argumentos.
A continuación, propongo un ejemplo y el correspondiente análisis sintáctico.
- El técnico concluyó en que la mejor estrategia era defender.
El análisis sintáctico se reduce al siguiente esquema:
- El técnico (sujeto)
- concluyó (núcleo verbal)
- en que la mejor estrategia era defender (complemento de régimen conformado por la preposición “en” y la oración “la mejor estrategia era defender” transpuesta a función nominativa por la conjunción “que”).
En caso de que se suprimiera la preposición “en”, diríamos:
- El técnico concluyó que la mejor estrategia era defender.
El análisis sintáctico sería:
- El técnico (sujeto)
- concluyó (núcleo verbal)
- que la mejor estrategia era defender (objeto directo encabezado por la conjunción “que”, que transpone a función nominativa a la oración “la mejor estrategia era defender”).
Desde el punto de vista de la sintaxis, ambas construcciones son posibles, ya que ninguna resulta agramatical. Sin embargo, la idea que se expresa de una forma no es la misma que la que se expresa de otra.
Aplicación del planteo teórico de Emilio Alarcos
Volviendo al primer ejemplo, cabe destacar que en ese uso el verbo “concluir” no requiere un objeto directo en que recaiga su denotación, no obstante acepta complemento preposicional. Para verificarlo, es posible utilizar las pruebas propuestas por Emilio Alarcos en su Gramática de 1994 a fin de reconocer lo que él llamó objeto preposicional (en otras gramáticas, complemento de régimen):
- El objeto preposicional puede responder a la pregunta encabezada por la unidad interrogativa “qué” precedida de la preposición.
- En una construcción ecuacional se duplica la preposición del ejemplo original.
- Si el significado léxico del complemento de régimen fuera conocido y pudiera ser elidido, en su lugar se debería ubicar un representante pronominal tónico precedido de la preposición pertinente. (Alarcos Lorach, Emilio. Gramática de la Lengua Española, 1994).
Veamos las pruebas aplicada a nuestro complemento de régimen en el ejemplo “el técnico concluyó en que la mejor estrategia era defender”.
- Ante la pregunta “¿en qué concluyó el técnico? la respuesta se encuentra en nuestro complemento de régimen (objeto preposicional para Alarcos).
- Construcción ecuacional: “En que la mejor estrategia era defender fue en lo que concluyó el técnico". Tal como destacó Alarcos, la preposición se duplica en los casos en que nuestra expresión sometida a análisis representa al complemento de régimen.
- El técnico concluyó en eso. Se cumple la sustitución del complemento de régimen por un representante pronominal tónico precedido de la preposición permanente.
En definitiva, según la aplicación de la propuesta teórica de Alarcos parece atinado afirmar que en algunos usos el verbo “concluir”, pese a ser transitivo, puede no requerir objeto directo, sino objeto preposicional.
Aplicación de observaciones realizadas por Alex Grijelmo
Otra propuesta útil para este análisis es el planteo de Alex Grijelmo respecto a ejemplos de complemento de régimen. Este autor presenta el siguiente ejemplo:
- Confío en que llegues antes de la cena.
Y detalla:
…"el complemento preposicional renuncia a la condición de complemento directo que podría esperarse de él (por ejemplo, creó que llegará antes de la cena), pues aquí resulta imposible porque el régimen del verbo corta la circulación gramatical de las oraciones transitivas. La acción del verbo no pasa directamente a un complemento (al complemento directo) porque la preposición obligada establece un desvío.
Así: Confío en que llegue antes de la cena (al contrario de lo que sucede con creo que llegarás antes de la cena), no se puede volver pasiva: 'Que llegue antes de la cena es confiado por mí'… horroroso. Pero sí que llegue antes de la cena es creído por mí. (No es una frase muy estilosa, ni muy del idioma, pero sí resulta gramatical)". (Grijelmo, Alex. La gramática descomplicada. Impresos y Acabados Editoriales S.A de C.V, Nicolás Romero, Estado de México. 2007, p 371).
Aplicación de observaciones realizadas por Emile Sagler.
Para concluir (justamente en el sentido que estamos analizando) es oportuno citar el trabajo de Emile Sagler en donde dice:
"Concluir con (cuando aluda al con significado de fin). Las cortes de 1706 que concluyeron con la proclamación de Carlos III. 2. de (razonamiento) No debe concluirse de esto que el autor se conforme… Se podría concluir de aquí… 3. en (razonamiento). Algunos teóricos han venido a concluir en que el vehículo y el modo de presentación de la noticia pueden ser tan interesantes y excitantes como la noticia en si… 4. en (resultado). Eran indiscutiblemente bebedores empedernidos, y todas sus noches concluían en borrachera.(Slager, Emile. Diccionario de uso de las preposiciones españolas. Editorial Espasa Calpe, S. A. 2007).
.
Cuando leo artículos como este, me doy cuenta de la importancia de hablar bien. Una pequeña palabrita puede hacer una enorme diferencia.
ResponderEliminarJustamente, la preposición en este caso cambia el sentido de lo que se pretende comunicar.
ResponderEliminarGracias Gabriela. Saludos.
Por lo menos acá, en Argentina, el uso es el que señalás: "concluir algo" = finalizar algo; "concluir en algo" = llegar a una conclusión.
ResponderEliminarSaludos.
El nombre es Emile Slager, Martín. Cuidado, los datos bibliográficos quedaron mal.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Pilar:
EliminarYa lo corregí. Saludos cordiales, es un gusto recibir tu visita.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar